La manipulación política de la montaña

Este es el título de un artículo que, firmado por José María Campos, encontró el Húsar cuzeando por Diario de León.

Piensa el Húsar que las cosas pueden decirse más alto pero no más claro y se pregunta, si todos estamos de acuerdo en que los políticos elegidos por todos nosotros para defender nuestra tierra (se resiste el Húsar a llamar "leoneses" a estos "estómagos agradecidos" que olvidan, sistemáticamente, quién les paga los sustanciosos sueldos que disfrutan) ¿cómo es posible que sigamos apoyándoles con nuestro voto?

El próximo domingo, 7 de Junio, tenemos una cita en las urnas. Cierto es que elegimos a nuestros representantes en el Parlamento Europeo y no a nuestros "gestores" más próximos pero la lejanía no debe hacernos olvidar que, cada vez más, las decisiones "de Bruselas" influyen en las leyes nacionales.

Hacer dejación de nuestra responsabilidad no acudiendo a las urnas, solo contribuye a dar un "cheque en blanco", otro más, a politiquillos que no se lo merecen y que creen que pueden tratarnos como a borregos agradecidos que recompensaremos con votos sus mentiras, una y otra vez repetidas, sus promesas, una y otra vez incumplidas y que nuestra frágil memoria nos impedirá recordar un pasado en el que no salen, precisamente, favorecidos. NO SE MERECEN NUESTROS VOTOS pero la abstención no es la solución, hace más daño el voto en blanco que demuestra un interés por el devenir político pero un rechazo a todos los que nos gobiernan.

Desde que existe en España "esta" democracia que padecemos, los leoneses llevamos un cuarto de siglo siendo gobernados por el PP en la autonomía, mientras durante ese mismo tiempo, en el Gobierno Central se han alternado primero UCD (4 años) luego el PSOE (13,5 años) después el PP (8 años) y actualmente el PSOE (5 años). Sinceramente, ¿puede algún leonés declararse satisfecho con alguno de dichos gobiernos? ¿En qué podemos distinguir estos partidos a efectos prácticos de defensa de nuestra identidad y nuestra cultura? La realidad es tozuda y todos ellos han sido a cual más nefasto para la existencia de este pueblo milenario.

¿Queda un solo leonés que, de buena fe, puede todavía creer en que alguno de los partidos estatales va a defender nuestros derechos como pueblo y nuestra igualdad con los demás pueblos de España?

Sin más os dejamos el artículo prometido, con la conocida salvedad de que las negrillas son responsabilidad del Húsar:

LA MONTAÑA oriental leonesa sigue siendo el laboratorio político de experimentos de las administraciones y en especial de la Junta, ya que cumple con los requisitos: hay mucho estómago agradecido, no se lee ni lo que manda la administración y lejos de manifestar las quejas que sí hacen los políticos en los bares -”y por cierto muy duras contra los suyos-” se someten a la sumisión cuando llega el enviado feudal del reino autonómico. Vamos, ¡un chollo de comarca!. A esto hay que unir que entre el PP andan a tiros situación que también se repite en el PSOE.

Súmele usted a todo esto que en el único municipio político y reivindicador por naturaleza, Cistierna, el PP no es que esté desaparecido, simplemente no existe. Y es que todos quieren ser diputados en el 2011. Todos están en otras batallas que no les ha dejado tiempo para leerse las directrices de ordenación del territorio (DOT). Situación que lamentablemente se repite en los procuradores leoneses que han demostrado estar más pendientes del sillón que de defender esta comarca de la que mucho hablan y poco conocen, y que sigue anegada en las aguas residuales lanzadas por los políticos. No obstante, les guste o no al PP y a los disidentes del PSOE, el giro que han dado las DOT se produjo porque el diputado de Cistierna, Nicanor Sen, levantó la primera polvareda y ese protagonismo que les ha dejado fuera de juego ha molestado en demasía. Empiecen ustedes a leer que ahora entiendo por qué las DOT tenían textos del Rincón del Vago.

Respecto a San Glorio y las DOT es evidente que es una pelota que ahora está en el tejado de la Junta y en el fondo es un «marrón» que no se quiere comer ni el PP ni el PSOE y andan buscando una cabeza de turco. Las declaraciones del viceconsejero de Medio Ambiente en Riaño son muy claras: «las directrices lo que permitirán será realizar es una evaluación ambiental de aquellos proyectos que propongan una estación de esquí en un entorno que cuenta con la mayor protección natural de Europa». Y habló también del futuro: «serán las pequeñas iniciativas turísticas las que contribuirán a la mejora de esta zona». Todo esto me recuerda que lo que dice no dista mucho de lo que dijo hace unos años la ex ministra socialista Cristina Narbona. Lean ustedes señores políticos que la lectura cultiva la mente y despierta el espíritu. Por cierto, ¿han leído ustedes en qué parte de las DOT se habla de la línea de alta tensión Sama-Velilla?, porque la luz ha debido cegar la vista a los redactores del texto.

Respecto a ese interés dirigido de hacer de esta montaña un feudo palentino sólo veo dos similitudes. La frontera provincial que ya estudiábamos en la escuela, y que en zona de Burón, Riaño, Crémenes y Boñar se escucha la Ser de Palencia en vez de la Ser de León. Hay que reconocer que éstas son «dos grandes identidades» que nos unen especialmente para aquellos politiquillos de calzoncillo suelto a los que los hijos de sus hijos les van agradecer el futuro que les van a dejar en esta comarca. ¡Cuanta hipocresía hay suelta!. Seguirán ustedes hablando otros veinte años de San Glorio, proyecto que curiosamente siempre se reivindica en periodo electoral y del que siguen sin exigir que se realicen inversiones reales como los accesos por la parte leonesa que no tienen problema. Pero no interesa hablar de dinero ya que San Glorio está dando mucho juego político. Respecto a las Aguas Bravas o la ampliación del museo de Sabero, todo paralizado. Y es que Valladolid sabe que en esta comarca hay muchos corderos y pocos lobos.