Hacérsele a uno los dedos huéspedes: Tomarlo todo por la tremenda, sintiéndose insultado y atacado sin motivo y viendo la proyección de los propios fantasmas en todas partes.
Ponerse la venda, antes de tener la herida ó Curarse en salud: Dícese de quien se muestra ofendido por un agravio imaginario mientras ofende a los demás.
Quien se pica... ¡¡¡ajos come!!!: Dícese de quien, ante un comentario normal, reacciona violentamente de palabra sintiéndose ofendido y demostrando que, en realidad, habría motivos para pensar mal de su actuación.
Llámaselo hijo, antes de que te lo llamen: Por último, se usa esta expresión para denunciar a quienes tratan de insultar a los demás con apelativos que temen les sean aplicados a ellos mismos.
Supone el Húsar que, llegados a este punto, estarán los lectores un tanto escamados por tanto refrán y se preguntarán, cuando menos, por el hecho que los motiva.
Es muy sencillo; ha llegado a nuestras manos una Carta al Director remitida por nuestra colaboradora Lláncara en la que se queja de la prensa leonesa, eso sí, salvando a algunos periodistas íntegros que, cumpliendo con su obligación de ser notarios de la actualidad, informan sobre la auténtica realidad de este "Viejo" Reino de León, sojuzgado, maltratado y ninguneado por una Junta mezquina que no cumple ni con sus obligaciones de velar por el bienestar de todos sus administrados (¿para qué querrán competencias?) y solo piensa en el medio de destrozar la cultura leonesa y aniquilarnos como pueblo. Para que ustedes se hagan una idea, copiamos, a continuación, la carta de Lláncara y la respuesta, realmente incomprensible además de ofensiva, que recibió desde el Diario de León.
Desconoce el Húsar si quien así responde es periodista o administrativo en dicho periódico (nos reservamos otros calificativos), pero encuentra realmente preocupante una comprensión escrita tan deficiente por parte de alguien que trabaja (en el puesto que sea) en un medio de comunicación escrita.
Un buen consejo
Dicen de las prostitutas que, cuando se hacen viejas, ofrecen sus servicios gratuitamente o incluso pagan a los clientes para mantener sus antiguos vicios. Creo que este oficio, la prostitución, no es el más antiguo del mundo ya que seguro que había allí algún periodista para contarlo. Su periódico debería entender este mensaje y poner sus barbas a remojar a no ser que quiera que les ocurra como a su colega y ya no lo leamos ni regalado. Todos tenemos derecho a opinar, aunque sea de modo diferente a su panfleto (palabra de La Junta). Sólo se salvan F. Ramos y E. Gancedo. Por ellos les seguimos leyendo, que no comprando ya que no nos sirven ni para llevar al w....
De: Maria Carnero Robles
Fecha: jueves, 13 noviembre, 2008 12:29
Lo de prostituta, lo dice con conocimiento de causa, no???
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