El orgullo y el futuro

Nuestra colaboradora Xana nos envía el siguiente correo que reproducimos a continuación. No creemos que precise de comentarios pero, como ya es habitual, las negrillas son del Húsar:

Abrí ayer el correo y me encontré que el collaciu José María me enviaba un enlace a un artículo del Diario de León con este más que demoledor título:

«La desidia de León y Laciana es inmensa»
Tras leer el artículo completo (http://www.diariodeleon.es/inicio/noticia.jsp?CAT=114&TEXTO=7180794) fui a la página de opinión y me encontré con una Tribuna de Enrique Soto que lleva por título:

Hombro con hombro

y que podéis leer completa en: http://www.diariodeleon.es/se_opinion/noticia.jsp?CAT=108&TEXTO=7180488

Os recomiento la lectura atenta de ambos artículos pero no puedo resistirme a resaltar algunos frases de los mismos.

Del primero:

Esta maestra asegura que mantener la lengua propia, como hace el valle de Arán, donde trabajó, supondría un factor de crecimiento muy positivo para Laciana. (¿Qué dicen ahora los papanatas que han venido predicando, desde su pueblerinos comentarios, en aras de una unidad común de destino -¡ay cómo me suena esto...!- opiniones radicalmente distintas?)

"La variedad de lenguas enriquece un territorio. Un ejemplo está en Arán, donde trabajé en un centro educativo. Pues bien, en este pequeño valle frontera con Francia -y que en realidad es muy similar a Laciana- se fomenta la lengua propia en los centros educativos de enseñanza infantil y primaria, así como los bailes típicos, la geografia de la zona... Todos estos conceptos se inculcan a los niños entre los 2 y los 12 años. Mi pregunta es: ¿Acaso no les hace más ricos a los araneses estas riquezas?

Mi valle tiene mucha riqueza, relacionada tanto con el medio ambiente como en lengua propia y tradiciones. Pienso que sólo se necesitan ganas de trabajar. En primer lugar, el trabajo debería comenzar en los centros educativos de la zona, ya que el futuro de Laciana es su juventud. No puede ser que los niños no sepan que Laciana es reserva de la Biosfera, que no conozcan las cimas de la zona o su lengua propia."

Del segundo:

Los leoneses casi lo hemos perdido todo. Las tres provincias leonesas estamos ahora en los últimos puestos en todos los parámetros socio-económicos. Antes de esta felonía estábamos en la media nacional. Los leoneses somos víctimas, perjudicados y marginados en la España de las autonomías.

Nunca habíamos sufrido tanto centralismo y tan adverso. Lo que está pasando con León es tan increíble que ni las propias víctimas lo podemos reconocer. Espero que cuando la historia conozca y cuente toda la verdad no tenga que decir que los leoneses fuimos tan mansos que nos dejamos degollar como corderos. De momento ya se dice que parece que tenemos horchata en las venas. ¿Qué más nos tienen que hacer para que salten por los aires toda nuestra paciencia, contención y respeto a los límites?

el ejercicio del amor propio de ser leoneses y la restauración de los derechos que corresponden al pueblo leonés son retos y tareas en las que nos tenemos que encontrar hombro con hombro todos los que sentimos amor por nuestra gente y por nuestra tierra, todos los que no nos vamos a rendir ante tanta adversidad, todos los que decidimos optar conscientemente por luchar hasta el fin por lo que consideramos justo.

De lo que nos hablan ambos artículos es de la pérdida del orgullo de ser leoneses lo que nos ha llevado a la pérdida de un futuro. Como muchas veces digo, no somos mejores ni peores que otros pueblos, simplemente somos nosotros, con nuestras virtudes y defectos, con nuestras costumbres y lengua, con nuestra historia y nuestra forma de entender la vida, en definitiva con nuestra identidad propia. Somos leoneses y, no solo no tenemos que pedir perdón por ello sino que ya va siendo hora de que nos sintamos orgullosos de serlo y reclamemos, alto y fuerte, nuestros derechos.

Para "redondear" mis reflexiones, hoy me encuentro en la sección de cultura del Diario del domingo (no había tenido tiempo de echarle una ojeada) un espléndido reportaje de Tomás Álvarez con el sugestivo título de:

Salvar el «Roncesvalles leonés» Reportaje Vergonzoso olvido

que podéis leer completo en los siguientes enlaces:

http://www.diariodeleon.es/hemeroteca/noticia.jsp?CAT=114&TEXTO=7178293&txtDia=28&txtMes=9&txtAnho=2008 y
http://www.diariodeleon.es/hemeroteca/noticia.jsp?TEXTO=7178291

También de este reportaje quiero resaltar un párrafo:

A distancia mínima -un kilómetro- se halla el paso del famoso puerto que une León con Asturias, a 1.378 metros de altura. La soledad también anida en torno a él y en el viejo Parador de Turismo, ahora cerrado. Un sinsentido de los tiempos, porque arte, historia y paisaje son suficientes atractivos como para hacer de este lugar un territorio con vida económica.

Y aquí llega mi reflexión ¿cómo se va a reanimar la vida de estos pueblos si, con la "espléndida" labor de comunicación que hace la Junta en las ferias de turismo, no hay prácticamente nadie que no haya venido por León que se imagine siquiera la altura de nuestras montañas? En Fitur las azafatas no conocen siquiera donde está el valle del Curueño y en las ferias de Turismo Rural, León no aparece en los stands de la Junta, según ellos "porque la Diputación no acude". Si, tal y como se les llena la boca cuando les conviene, somos "una comunidad" ¿no tendría que ser la Junta en su stand (en que supuestamente están representadas todas las provincias de la comunidad) quien supliera la ausencia de la Diputación?

Espero que leyendo todas estas cosas, TOD@S empecemos a preguntarnos por qué, además de sufrir la desidia y abandono por parte de la Junta, no recuperamos el orgullo de ser leoneses y defendemos nuestra historia, nuestra cultura, nuestra identidad, nuestro pasado, nuestro presente y, sobre todo, nuestro futuro.

La autonomía es una "herramienta" a la que tenemos derecho puesto que la Constitución proclama la igualdad de todos pero cuando la tengamos (¡que la tendremos!) también deberemos sentirnos orgullosos de nosotros mismos, exigir que se nos abone "la deuda histórica" y trabajar de firme para conseguir que nuestra tierra ocupe el lugar que se merece, lo que redundará en el beneficio de tod@s l@s leones@s.

Besines de Xana