Un Consejo Comarcal con sede en Villablino

Este es el título de un artículo en el que Alejandro Campillo Pestaña propone una solución para el Valle de Laciana, Ribas del Sil de Arriba y Babia.

No deja de resultar curioso que a tantas "cabezas pensantes" (y bolsillos cobrantes) como hay en nuestra provincia, Comunidad y otros varios, no se les haya ocurrido reclamar lo mismo que propone Alejandro.

Ellos, sin embargo, por vocación o quizá solo por enredar y entretenerse en algo, se dedican a "marear la perdiz" con propuestas extemporáneas como la de una adhesión al Bierzo. Otra melonada más que añadir a las que ya soportamos, puesto que, como es bien sabido, estos municipios nunca fueron bercianos. Añade, asimimo, de manera muy atinada, el autor, que esta solución contra natura, consolidaría un nuevo centro de decisión que únicamente vendría a retrasar, aún más, la llegada de soluciones.

Y como la cosa está más que clara, os invitamos a leer el artíclo, indicando que, como es habitual, las negrillas son sólo del Húsar y no pretenden guiar su lectura, sino destacar algunas verdades que deberían hacernos reflexionar:

El tradicional aislamiento del Valle de Laciana y de sus tierras vecinas de Ribas del Sil de Arriba y Babia ha conferido a sus habitantes una especial forma de ser acorde con lo agreste de estos valles.

Este espacio de la Montaña Occidental Leonesa necesita de revulsivos socioeconómicos para afrontar el siglo XXI sin los estigmas de la despoblación y el encarnizamiento con el medio natural. Entendiendo que el monocultivo carbonífero se ha acabado, y con la vista puesta en la potenciación de los valores turísticos, agroganaderos y la introducción de nuevas industrias respetuosas con el medio ambiente, como la electrónica y la innovación tecnológica, es necesario dotar a este territorio de un ente institucional propio para que se alce como interlocutor de lacianiegos, babianos y palaciegos ante las administraciones provincial y autonómica, además de establecer nuevas vías de financiación y coordinación de servicios para estos cuatro municipios.

La constitución por parte de Cabrillanes, Palacios del Sil, San Emiliano y Villablino de un Consejo Comarcal -el segundo de la Comunidad de Castilla y León-, además del incremento ya señalado en la financiación y la coordinación de los municipios y juntas vecinales a las existentes de Cuatro Valles, Diputación de León y Junta de Castilla y León, permiritía identificar claramente a esta apartada y olvidada tierra en el territorio de esta extensísima Comunidad Autónoma y en el conjunto de España.

Vistas las propuestas que a modo de cantos de sirenas se hacen hoy desde algunos sectores de El Bierzo para Laciana, que olvidan que esta tierra pasaría a contar con un centro más de decisión en Ponferrada a los existentes en Valladolid y León, ésta es una propuesta para integrar y dar voz a cuatro municipios que tienen el mismo fin de evitar la sangría poblacional y obtener progreso a partir de la explotación de sus valores naturales, y que a día de hoy cuentan con una escasa fuerza demográfica y por lo tanto de poder electoral y la consiguiente escasa influencia política.

No cabe duda de que la población asentiría favorablemente a este llamamiento, pero para ello la clase política ha de trabajar por y para los ciudadanos con visión de futuro. ¿Llegarán alguna vez a vislumbrar el camino para siquiera rozar el objetivo?