Día 12 de Diciembre, 20:30 horas; no era la primera vez que los leoneses habían sido convocados, en fechas semejantes, para significarse ante un hecho que debería dolerles en el alma.
En otras ocasiones sería el derrumbe del patrimonio, representado, nada menos que por la Catedral de Santa María de Regla, ayer era la caída de una nueva ficha de este juego macabro de dominó que nos conduce a la negra sima de la servidumbre política, social, económica y como consecuencia de todo ello, o en primer lugar, incluso identitaria.
¿Y qué le importa al común de los vecinos, que pasan de largo, si los de siempre, en una siniestra y letal partida de ajedrez, se aprestan a comerse la reina de las finanzas leonesas?
Apenas 200 esforzados (testimonial presencia de Burgos y Zamora, gracias por vuestro gesto), sin sentirse cohibidos por un frío paralizante, se dieron cita ante la convocatoria de Ciudadanos del Reino de León… Duelen más las insidias, los abandonos, los desprecios, las burlas ("Mucho ruido y pocas nueces", subtitulaba La Crónica -"a todo cerdo le llega su San Martín...") o el pasotismo que las puñaladas de unas temperaturas de noche de diciembre.
Se suele entonar, en los actos solemnes de las universidades, aquel canto de los goliardos medievales que nos recuerda “ubi sunt…?” “¿Dónde están los que existieron antes que nosotros?” Y algunos no pudimos por menos que escarbar en la memoria, echando de menos, en este ya demasiado largo rosario de agravios y agraviados de las Tierras Leonesas, toda una retahíla de colectivos, personas, personajes y nombres que, inexcusablemente, habrían debido unirse, como una sola voz para sostener esta ficha que, al ritmo que la rueda se mueve, será también devorada por el insaciable monstruo, remedo de espantoso hombre lobo, necesitado de nueva sangre para seguir alimentando su ego y su mastodóntica e irracional comparsa de vividores, gandules y oligarcas.
¿Dónde se encontrarían, que no estaban presentes a la llamada a filas, los cargos de un partido que, aunque sumó su voz a la convocatoria, apenas aportó media docena de acomodados en el organigrama? ¿Dónde los militantes que se dicen por miles? ¿Dónde los que, quiérase o no, viven del momio? ¿Dónde los que se dicen el nuevo leonesismo? ¿Dónde los que prefieren intrigar al calor de una cena? ¿Dónde ciertos alcaldes (y su equipo) que se han posicionado contra este despropósito? ¿Dónde algún sindicato que (poco dura la alegría en la casa del pobre) no hace tanto cacareaba su enfado por decisiones como la que comentamos? ¿Dónde los que han pedido apoyo cuando era su futuro personal o colectivo el que se hallaba en juego?
Dejad que el Húsar se sume, también, al grito desgarrado de Martin Niemoller que hoy el mundo conoce, en forma de canción:
"Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista.
Luego vinieron por los judíos y no dije nada porque yo no era judío.
Luego vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista.
Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante.
Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie que dijera nada".
“La solidaridad bien entendida comienza por uno mismo”, dirán algunos; mas ¿dónde habrá que buscar, si es que esto existe, el límite de tanta miseria moral, de tanta traición (¿bien pagada?) y de tanta bajeza? ¿Ni ante el ataque más desalmado trascenderemos de nuestro cainismo anarquista?
Pendiente abajo, envuelto ya en jirones de su escasa memoria, presto al sometimiento del esclavo o quizás a una muerte que venga a liberarle de nueva condición, arrastra un pueblo su glorioso pasado… ¿Y qué son 1.100 años en el libro de la historia?
4 comentarios:
Está claro que en León sólo se protesta en los bares. Yo ya sólo voy por no ser igual que aquellos a los que critico y por nada más.
Allí dejé unas cacerolas chinas abolladas y un gran pedazo del ya maltrecho ánimo. Tenemos lo que nos merecemos.
Es posible que muchos leoneses tengan lo que se merecrn pero no los que allí estábamos voceando nuestro descontento.
Otra cosa es que la mayoría no se molesten en acudir a determinadas protestas, mal publicitadas y convocadas anónimamente y en media docena de días. Una convocatoria semejante debiera haberse preparado con mucho más tiempo para no resultar tan menguada pero, evidentemente TODOS debiéramos estar dispuestos a acudir a cualquier acto que se proponga para la defensa de nuestros derechos, tan pisoteados.
Sin embargo, se echó a faltar la asistencia del PSOE y la UGT de León que se han pronunciado contra la fusión de las Cajas. ¿Será que solo lo hacen con la boca pequeña?
Los votantes leoneses debieran ser mucho más exigentes con sus representantes pero, desgraciadamente, llevamos 25 años de frustraciones y pérdida de orgullo que nos están convirtiendo cada día en más dóciles ante los agravios sufridos.
No olvides nunca el lema de este Colectivo, que esperamos termine calando en los leoneses:
¡¡¡NOSOTROS NO CAPITULAMOS!!!
Los leoneses acudirían en masa a una convocatoria de ese estilo si se convoca adecuadamente; no se puede pretender anunciar algo así con cinco días de antelación... la gente no va.
Los carteles, por ejemplo, hacían alusión a una in-fusión... hombre, mejor hubiera sido algo más explicito como "Caja España no se la llevan de León" o algo así... yo, que se de que iba el tema, no tuve problemas, pero amigos que tengo que no leen demasiado la prensa ni nada se preguntaban extrañados que era eso de la In-fusión (y ante eso, tan siquiera se acercaban a leer de que iba el cartel).
No hay que desanimarse... hay que seguir convocando estas cosas, con mayor antelación si es posible y darle la mayor publicidad posible. Los leoneses responderán como han hecho en otras ocasiones.
Un Saludo!
Totalmente de acuerdo "Leonés", es lo que decimos, con otras palabras, en el segundo párrafo de nuestra respuesta anterior.
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